LAS DOS CARAS DE LA MONEDA

UNA FINAL NO TAN ESPERADA

Por Karla Tovar

En los últimos años el tenis se ha destacado por dos jugadores que merecen ser llamados grandes: Rafael Nadal y Roger Federer. Cada vez que estos dos jugadores se enfrentan son finales de largas horas, recordando la final del torneo de Wimbledon 2008 que duro más de 5 horas, donde por primera vez Nadal se proclamo campeón, dejando a un lado al cinco veces ganador del torneo, el suizo Roger Federer.

Tras dos semanas de intensos encuentros entre los mejores tenistas, llegaban los cuartos de finales y todo indicaba que los dos máximos representantes del tenis darían un espectáculo inolvidable. Pero todo cambio cuando quedaron fuera del abierto de Australia Rafael Nadal y Roger Federer.

Por primera vez habían eliminado al numero uno y dos del ranking de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), no llegaban a una final de Grand Slam. En Melbourne, Australia. La final del tenis se aproximaba, en esta ocasión la gloria se disputaría entre el serbio y número tres del mundo, Novak Djokovic, contra el británico Andy Murray. Una final que muchos no esperaban ver.

Rafael Nadal sufrió en el partido de cuartos de final. Con una lesión en la pierna izquierda, su velocidad no era la misma por lo que en varias ocasiones interrumpió el partido para someterse a revisión médica. Ventaja que supo aprovechar su compatriota David Ferrer que demostró desde los primeros minutos una amplia ventaja para lograr así su pase a semifinales. Una gran sorpresa para todos los asistentes que le decían adiós al número uno, el rey del tenis había sido derrotado.

En cuanto a Roger Federer, como siempre salió a la cancha confiado de su rival, lo conocía muy bien, pues ya eran varias ocasiones que estos dos jugadores se enfrentaban. Un partido donde ambos jugadores demostraron estar en un buen nivel, pero los errores del suizo y su falta de concentración por momentos, le costaron el partido. Fue así como “su majestad” Roger Federer quedaba fuera del torneo y se perdía una final más.

El tenis masculino ha sido liderado por Roger Federer desde el 2 de febrero de 2004 donde consiguió colocarse en el número uno, logrando un record de 237 semanas consecutivas en el ranking de la ATP. Pero el reinado del suizo terminó el 18 de agosto de 2008 donde Rafa Nadal logró posicionarse del número uno.

La ventaja entre estos dos jugadores es mínima, comparada a los demás jugadores que luchan por estar entre los primeros lugares. Entonces podríamos decir que entre Nadal y Federer se encuentra el imperio del tenis.

Pero no podemos dejar a un lado a las damas, el tenis también se ha hecho para las mujeres. Su manera de jugar es más versátil y competitivo, cada torneo las primeras posiciones siempre están en disputa. No hay mujer que lleve una ventaja sobre las demás. A excepción de las hermanas Williams que por un momento fueron las mejores jugadoras del mundo, pero en estos últimos años le han dado el paso a nuevos talentos del tenis femenil.

Vivimos en un mundo donde el futbol es el rey de los deportes, el de mayor audiencia, el de mayor importancia, la sociedad esta hipnotizada por el balompié, deporte donde resalta la masculinidad.