LA GUERRA PERDIDA…
LOS MIL NIÑOS MUERTOS
Distraída por un asunto mediático con alto grado de especulación, censura, estrellitis e intereses corporativos, el grueso de la sociedad mexicana no reparó en la gravedad y lo lamentable que resultó el informe presentado por el Comité de Derechos Humanos del Niño de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el viernes 4 de febrero.
Quizás pasó aparentemente desapercibido porque se presentó en Ginebra, Suiza; pero el informe sustentado en datos revelados por Organismos No Gubernamentales y dados por buenos por la ONU, indica que en los últimos 4 años, al menos mil niños han muerto en México, víctimas de la guerra que el Gobierno de la República enfrenta contra el crimen organizado, casi desde el inicio de la administración del presidente Felipe Calderón Hinojosa.
La cifra es demoledora, mil niños muertos; adicional a ello el informe denuncia violaciones a los derechos de los infantes, la falta de investigación por los crímenes perpetrados por personal militar, la creciente incorporación temprana de adolescentes a las escuelas castrenses, la sujeción de menores de edad al código de justicia militar y el envío de alumnos de instituciones militares a cumplir acciones de erradicación de cultivos de marihuana y combate al crimen, lo que pone en riesgo su vida.
Todo ello resulta un panorama trágico, más cuando la misma ONU dice que el gobierno de México carece de información sobre el uso de menores con fines bélicos por parte de grupos armados no gubernamentales, por lo que le informa que entre 25 mil y 30 mil niños y adolescentes han sido reclutados y forzados a colaborar con el crimen organizado y agrupaciones paramilitares.
Desde el inicio de la “guerra” del gobierno en contra del narco, que el presidente Felipe Calderón insiste en que van ganando, se han contabilizado más de 37 mil ejecuciones vinculadas a dicha guerra, lo que según algunas organizaciones ha dejado cerca de 40 mil niños huérfanos, lo que es otra forma trágica de daño colateral.
En diciembre del 2010, la Red por los Derechos de la Infancia de México, afirmó que hasta entonces se tenían contabilizados mil 66 niños muertos por esa “guerra” y para nadie es desconocido que por los “daños colaterales” como los llama el gobierno, ha habido muchos menores de edad muertos, incluyendo bebés, incluso en retenes militares, solo porque los vehículos en los que viajaban no se detuvieron o porque los soldados pensaron que no lo harían.
Reconociendo los logros del gobierno, méritos que no se le pueden negar, en 4 años de “guerra”, ejército y policías han capturado a 17 sujetos calificados por ellos como “grandes capos”, cifra notable, pero que se pierde en la desproporción cuando sin mucho análisis se percibe que a cambio de ello se han registrado más de 37 mil ejecuciones y que mil niños han muerto por ello.
El pueblo se indigna por sandeces como las de Top Gear y se distrae en asuntos que crecen y se elevan como una burbuja de jabón que en un momento se rompe y pasa a ser asunto olvidado, pero ignora situaciones graves, tristes, lamentables, penosas, como el informe de la ONU, que son el verdadero saldo de una “guerra”, que los militares y su comandante supremo dicen ganar, pero que los civiles pierden, porque México está perdiendo quizá lo más valioso que tiene, que son sus niños.
El gobierno, generalmente o nunca, responde a este tipo de señalamientos, para ellos son casos aislados, daños colaterales y podrían decir que no es cierto, quizá tengan razón y no son mil niños fallecidos, no todos están muertos, algunos están como el “Ponchis”, en la cárcel; otros en activo y algunos están huérfanos, igual son formas de morir.
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Comentarios: joelsan@prodigy.net.mx
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